domingo, 13 de mayo de 2012

Oda (*) FERNANDO PESSOA

Para ser grande, sé entero: nada Tuyo exageres o excluyas. Sé todo en cada cosa. Pon cuanto eres En lo mínimo que hagas, Por eso la luna brilla toda En cada lago, porque alta vive. (*) De heterónimo Ricardo Reis

domingo, 4 de marzo de 2012








REACCIÓN EN CADENA

Un inocente paseo por el bosque
puede llegar a convertirse
en una implacable cacería.
Un inofensivo intercambio de miradas
puede desatar la reacción en cadena,
la desintegración total de la materia.

Besaría su boca, pero el riesgo es incalculable.




ZOO

Corro como un dogo,
salto como un gamo,
río como un mono,
rebuzno como un burro
masticando violetas,
revoloteo como un cuervo
sus hondonadas,
rujo, gruño, grazno,
bramo de ganas,
gimo de gozo
en sus verduras.

Todo mi zoo la festeja.

LOBOS Y OVEJAS Manuel Silva Acevedo

Hay un lobo en mi entraña
que pugna por nacer
Mi corazón de oveja, lerda criatura
se desangra por él

Por qué si soy oveja
deploro mi ovina mansedumbre
Por qué maldigo mi pacífica cabeza
vuelta hacia el sol
Por qué deseo ahogarme
en la sangre de mis brutas hermanas
apacentadas

Me parieron de mala manera
Me parieron oveja
Soy tan desgraciada y temerosa
No soy más que una oveja pordiosera
Me desprecio a mí misma
cuando escucho a los lobos
que aúllan monte adentro

Yo, la oveja soñadora,
pacía entre las nubes
Pero un día la loba me tragó
Y yo, la estúpida cordera,
conocí entonces la noche
la verdadera noche
Y allí en la tiniebla
de su entraña de loba
me sentí lobo malo de repente

Si me dieran a optar
sería lobo
pero qué puedo hacer si esta pobre pelleja
no relumbra como la noche negra
y estos magros colmillos no muerden ni desgarran

Si me dieran a optar
sabría acometer como acometo ahora
esta mísera alfalfa, famélica, ovejuna

Si me dieran a optar
los bosques silenciosos serían mi guarida
y mi aullido ominoso haría temblar a los rebaños
Pero qué hacer con mis albos vellones
Cómo transfigurar mi condición ovina

Yo, la obtusa oveja,
huía tropezando con mis hermanastras
El lobo nos seguía acezando
Y entonces yo, la oveja pródiga,
me quedé a la zaga
El lobo bautista me dió alcance
Se me trepó al lomo derribándome
y enterró sus colmillos en mi cuello
Vieja loba, me dijo
Vieja loba piel de oveja
Quiero morir contigo
Esperaré a los perros
La sangre me manaba a borbotones
Parecíamos un sol enterrado de cabeza
en el suelo

Yo era una oveja mansa
Siempre miré hacia el suelo
Yo era sólo una oveja rutinaria
Yo era un alma ovejuna
sedienta de aventuras
Yo era en el fondo
una oveja aventurera
Yo deseaba conventirme
en oveja descarriada
Expreso aquí mis sinceros agradecimientos
a la piadosa águila humana
que me desgarró la yugular de un picotazo.

domingo, 8 de enero de 2012

LECTURA, MUNICIPIO Y ARQUITECTA




Por aquellas cosas que tiene la vida y más por trámites burocráticos tuve que pasar una mañana en una dependencia municipal de cierta ciudad ubicada al norte del país, el tenso ambiente entre los oficinistas que parecían ser arquitectos, hacía mas evidente el frio matinal; en determinado momento posiblemente el jefe por su actitud de -yo se más que ustedes- les dio la siguiente orden; lean es que ustedes deben leer. Me llamó la atención el mensaje tajante y algo déspota por lo que pregunté sobre este a una joven y simpática arquitecta, que sin más me conto toda la historia: La dependencia debía encargarse de una nueva área, para los cuatro una arquitecta, un ingeniero civil, un promotor cultural y un técnico era un tema totalmente nuevo que los tenía muy preocupados, ante ello el que resulto efectivamente el jefe, les recomendaba leer; lamentablemente me confesó la chica que leía y no entendía nada, al final de la lectura no recordaba por más interés que le ponía.
Al medio día abandoné la dependencia sin haber terminado el trámite, lamentando la ineficacia de la burocracia , dudando de los resultados de esta área y preocupándome por el futuro del país.

viernes, 15 de abril de 2011

Eu Sei Que Vou Te Amar (VINICIUS DE MORAES)



Yo se que te voy a amar
Por toda esta vida te voy a amar
En cada despedida te voy a amar
Desesperadamente yo se te voy a amar

Y cada verso sera para decir
Que yo te voy a amar
El resto de mi vida

Yo se que voy a llorar
A cada ausencia tuya voy a llorar
Pero con cada vuelta vendras a apagar
Lo que la ausencia tuya me causo

Yo se que voy a sufrir
La eterna desventura de vivir
A la espera de vivir junto a ti
Por toda esta vida

viernes, 4 de febrero de 2011

POEMAS DE JOSE GUATANAVE (PERUANO)





LA MANTIS RELIGUIOSA


Mi mirada cansada retrocedió desde el bosque azulado por el sol
hasta la mantis religiosa que permanecía inmóvil a 50 cm de
mis ojos
Yo estaba tendido sobre las piedras calientes de la orilla del
Chanchamayo
y ella seguía allí, inclinada, las manos contritas,
confiando excesivamente en su imitación de ramita o palo seco.
Quise atraparla, demostrarle que un ojo siempre nos descubre,
pero se desintegró entre mis dedos como una fina y quebradiza
cáscara.

Una enciclopedia casual me explica ahora que yo había destruido
a un macho
vacío.
La enciclopedia refiere sin asombro que la historia fue así:
el macho, en su pequeña piedra, cantando y meneándose, llamando
hembra
y la hembra ya estaba aparecida a su lado,
acaso demasiado presta
y dispuesta.
Duradero es el coito de las mantis.
En el beso
ella desliza una larga lengua tubular hasta el estómago de él
y por la lengua le gotea una saliva cáustica, un ácido,
que va licuándole los órganos
y el tejido del más distante vericueto interno, mientras le hace gozo,
y mientras le hace gozo la lengua lo absorbe, repasando
la extrema gota de sustancia del pie o del seso, y el macho
se continúa así de la suprema esquizofrenia de la cópula
a la muerte
Y ya viéndolo cáscara, ella vuela, su lengua otra vez lengüita.

Las enciclopedias no conjeturan. Esta tampoco supone que última
palabra
queda fijada para siempre en la boca abierta y muerta
del macho.
Nosotros no debemos negar la posibilidad de una palabra
de agradecimiento.

Y ESTE OTRO FANTASTICO



RESTAURANTE VEGETARIANO





A los vegetales se entra
con hambre de animal longevo y apacible, y lentamente
se acaba
la lechuga.

A la carne se va distinto, se ingresa a ella
con ansia orgánica, casi disputándola
como si fuera carne
del día de la resurrección, y se acaba
el bife.

Recuerdas:
para que tú vivieras
tu familia depredaba la tierra para ti,
pollos patos reses cuyes cabritos carne
para convalecer y durar.

El alimento en la boca te relaciona
con el mundo. Hay días de felino
y días de paquidermo. Hoy sean bienvenidas
las benéficas ensaladas, la suave soya y las frutas
aunque tarde:
ya cincuenta años que comes carne
y estás eructando miedo.

Pero hay días que no tienes carnes ni vegetales
sino arena en la lengua. Te explicas: tal vez has comido
una sequedad inicial, insidiosa, de pecho, y nunca
se acaba, el desierto
nunca se acaba.

martes, 28 de diciembre de 2010

GABRIELA MISTRAL, De la conferencia “Poesía Infantil y Folklore”, pronunciada en Madrid en 1935




“El niño ama el ritmo hasta un punto que no sabemos los maestros, lo sigue cantando con el cuerpo, lo baila en el patio, lo bracea, lo pernea, lo cabecea. Y aun parece más niño cuando juega así, y es cierto que es más niño, porque se da enterito, como la marea, o como el viento, a la respiración de la naturaleza. (…)

El niño es quien mejor huele lo mortecino y tira lo empalado y se fastidia con lo vivo a medias. Viene saliendo de la fragua de los fuegos primordiales y se da mejor cuenta que nadie cuando le dan lagartija o pájaro de trapo. El va derecho a lo caliente, lo ágil, y ningún mañoso lo convence con el monigote o el pelele; todos sus sentidos, que parecen pájaros de alertas, saben de un golpe, al tocar, o al oír, o al ver, si aquello que le dan es pasto fresco. (…)

Al niño le pertenece, y él lo sabe, todo cuanto va corriendo vivo por el lomo del mundo: luz, agua y palabra cantada o cantable”.